domingo, 20 de enero de 2013

Deseo.


Antes de soplar las velas es tradición pedir un deseo… ¿Cómo puedo pedir uno solo? Si tantos deseo.
Deseo tiempo compartido con quienes quiero y también con quienes aún no conozco.
Deseo permanecer enamorado, ser amado y deseado por aquellos a quienes amo.
Deseo no arrepentirme por lo hecho y nunca arrepentirme de lo que dejo de hacer.
Deseo acariciarte suavemente para tocar tu alma.
Deseo derribar mis muros, no importa volverme indefenso, porque así derribaré el muro del miedo que me hace tan vulnerable.
Deseo ser un hombro para quien necesite descansar su cabeza, una mano tendida para quien quiera levantarse y un brazo para quien quiera asirlo al caminar a mi lado.
Deseo nunca sucumbir a la tentación de la indiferencia al sufrimiento ajeno.
Deseo la melancolía del pasado y la esperanza del futuro, pero especialmente deseo tu presente en mi presente.
Deseo la vida, alegre con riesgos e ilusiones y deseo la muerte, tranquila, rápida e inesperada.
Deseo no rendirme nunca y aun con el último aliento, agotar también el postrero intento.
Deseo la soledad y la buena compañía.
Deseo el silencio y deseo la palabra, porque hay tantas cosas que decirnos, deseo entenderte y que me entiendas.
Deseo sentir mi corazón latiendo al mirarme en tus ojos de niña enamorada.
Deseo el inmenso placer de disfrutar la poesía, para tener un pedacito de poeta.
Deseo tenerte, aunque implique el riesgo de perderte.
Deseo alguien que me cuide y alguien a quien cuidar.
Deseo despertar cada día con un beso y una ilusión, dormir cada noche contemplando tu belleza.
Deseo embriagarme para perder las formas y estar sobrio para guardarlas.
Deseo aprovechar cada oportunidad para contemplar las estrellas y asombrarme de que la inmensidad del universo cabe en mi mirada.
Deseo ser libre y perder la libertad para ser esclavo de tus besos.
Deseo sufrir incontinencia de abrazos, naufragar en muchos brazos aunque me juzguen de loco.
Deseo la cruda de cada mañana, no por el espiado de mis culpas, sino por el recuerdo del frenesí vivido.
Deseo volver a sonreír con sólo recordarte y ser alguna vez la causa de tu risa.
Deseo que tu cuerpo en mi cama nunca me dé igual.
Deseo cada día vivir un pedazo de niñez.
Deseo, sobre todo, nunca perder el deseo de seguir deseando.

Diego Ugarte.


Descripción del poema:


Es un poema que habla de los deseos simples como metas personales, con las cuales muchos se sentirán identificados, en varios momentos de la vida. 
Autor: Diego Ugarte

2 comentarios:

  1. Hola guapa, escribes muy bien, un placer.
    te dejo mis saludos desde Valencia.
    feliz semana.

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    1. Gracias Ricardo :D pero este poema fue escrito por Diego Ugarte, Saludos!!!

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